ÁCIDO BÓRICO Y LIBERTAD

Anteayer vi unos minutos del programa 59”, donde algunos periodistas analizaban los temas más importantes de la política nacional. El rato que yo les dediqué trataron sobre todo el tema de la piscina de Pedro J., que estaba allí, de cuerpo presente, defendiendo, no ya su piscina, sino la gravedad del tema de su piscina, canario de la mina que nos informa a todos del estado de la libertad en este país. Digo que estaba de cuerpo presente porque ese hombre, como el inefable Eduardo Zaplana, transmite la sensación de estar pensando siempre lo contrario de lo que dice y porque aquel día debía hacerlo doblemente, ya que era, entre todos los periodistas allí presentes, el único que sabía que un periódico, el suyo, iba a publicar, al día siguiente, a toda página, la existencia, por fin, de la prueba definitiva que vincula a ETA con el atentado del 11-M y muestra cómo la policía lo ocultó conscientemente al juez y a la sociedad, excluido el periódico El Mundo, cuyo director vela por la verdad entre brazada y brazada en la piscina de la libertad.


Los investigadores del periódico El Mundo lo que saben de investigación lo han visto en CSI, ese entretenimiento para niños donde las pruebas materiales esperan a los detectives con los brazos abiertos ansiando que el detective gordo las relacione correctamente. El pelo que hay entre el barro de la rueda es de la misma persona que el pedo que había en el reservado de la discoteca donde apareció el bolso de la chica. Teniendo tan claras las pruebas, es cuestión de encontrar las relaciones, lo cual no es difícil, porque el capítulo de CSI tiene que durar una hora. Algo parecido le pasa a El Mundo, que, aunque parezca increíble, se publica a diario y tampoco puede dedicarle mucho tiempo a pensar.

En dos pisos investigados por la policía, con tres años de diferencia, se encontró...¡ácido bórico! Uno era de un implicado en el 11-M (a expensas de lo que diga Trashorras), y otro era de un etarra. Hay un informe en el que esto se relaciona mientras al juez se le envió un documento en el que no se hace constar esa relación. ¡Pueden estar las cosas más claras!

Eduardo Zaplana y Mariano Rajoy inmediatamente se han interesado por el tema, gravísimo. Personas tan importantes, seguro que tienen internet, por lo que su interés por el ácido bórico no debe ser a humo de pajas sino conocedor de lo que se encuentra en una de las primeras referencia que ofrece google (http://www.fredmeyer.com/Es-Supp/Boric_Acid.htm):
“En el pasado, el ácido bórico se usaba como tratamiento tópico para niños con dermatitis de pañal. Sin embargo, incluso en forma diluida (3%), causaba una gran toxicidad e incluso llegó a causar dos muertes. Por lo tanto, no se debe aplicar ácido bórico a la piel de los lactantes y niños pequeños”.

¡Dos niños muertos! Está claro que, en España, hay un pacto para no investigar. Si no lo hubiera podríamos enterarnos de cosas tan importantes como esta:

“Sin embargo, en un estudio más reciente, no se describieron efectos secundarios graves con el uso del ácido bórico como tratamiento para la vaginitis”.

Mariano Rajoy y a Eduardo Zaplana, quienes quieren saber TODA la verdad, tienen por delante el reto de enterarse de la razón por la que un etarra y un implicado en el 11-M compartirían vaginitis. Para plantearse las hipótesis que resuelvan tan importante enigma (que Zaplana llama "alomojos"), seguramente quedaran otra vez con Pedro J., a chapotear juntos en la piscina de la libertad, donde, o cambian el agua, o podrían acabar ellos mismos escocidos y, necesitando, por lo tanto, el ácido bórico (al 3%) por el que preguntan.

Comentarios

Anónimo ha dicho que…
Extraído del último TMEO: http://img75.imageshack.us/img75/2883/piscijotaci5.jpg
Anónimo ha dicho que…
Todo este periodismo de investigación de El Mundo es un gran experimento de conductismo social. Alomojó algún día, contra pronóstico, toda ésta laya patética prende en el subconsciente colectivo y se demuestra que sólo el Papa puede tener razón (con lo cual volvemos a la parte contratante de la primera parte, etc, etc...)
Anónimo ha dicho que…
canario de la mina?
Ángel ha dicho que…
el pajarito que los mineros llevaban a la galería para que garantizaran que el aire no tenía grisú. Si el párajo moría, había que salir por pies.
Anónimo ha dicho que…
En efecto. Ni José Vélez ni Braulio bajaron a ningún pozo a cantar"soy minero" ni siquiera vulelvú dansé avec muá quieres que bailemos un vals".

Lo que ocurre a Pedrojota es lo mismo que a los islamistas: está crecido por sus éxitos (recordad que pese a ser pillado literalmente en bragas, le sigue contratando la conferencia episcopal en la Cope y los altos cargos que le grabaron están en la cárcel).